Cuando Dios creo al hombre, no le encontró una ayuda, en nada, así es que Dios tuvo que formar a una mujer que crear del mismo cuerpo de Adán, esto es muy dificil de creer por los evolucionistas; pero, Dios creo a la mujer como la ayuda idónea del hombre. Cuando como personas llegamos al matrimonio lo que nos lleva a este, es en su mayoría la pasión y el deseo sexual en un mayor porcentaje que el amor, por otro lado cuando se llega al matrimonio, aunque hayan pasado un tiempo como novios, ese lapso no sirvió para que se conocieran a fondo, así es que la pareja que se presenta ante el altar, son dos completos desconocidos que no saben como es el uno ni el otro, son dos orgullosos caracteres dispuestos antes, que a dejarse el uno del otro, a defender a capa y espada su personal forma de pensar, eso les lleva a diarias confrontaciones, así es que como estan por lo regular acostumbrados a salirse con la suya, quieren seguirlo haciendo con su conyuge, entonces las diarias refriegas emocionales, les llevan a un fastidio de vivir juntos, lo que para aumentar los conflictos lleva a uno de los miembros del matrimonio a la infidelidad, desgraciadamente surgen redentores o redentoras, que estan dispuestos a apoyar, a mimar, a escuchar al conyuge que se queja, entonces surge la expresión "es que el o ella si me escucha, si sabe trata a una persona en conflictos" es cariñoso o cariñosa.
Que es lo que debemos hacer; primordialmente mi consejo es que luchen por bajar la guardia en una refriega matrimonial, esto no es nada fácil; pero si dejan que ese bajo porcentaje de amor que los llevó al altar (hablo para los que tuvieron el coraje de esperar hasta el día de llegar al altar, porque los que no tuvieron ese coraje, estan llevando la penitencia en el pecado, aunque también hay solución en este consejo), aumente, si se miran a los ojos y se declaran su amor, no para tener relaciones; porque por lo regular despues de una refriega matrimonial, viene la reconciliación y las relaciones sexuales que levantan la bandera blanca matrimonial por un tiempo, para después seguir en la pelea que va deteriorando la relación matrimonial. Si no tienes el amor de Dios en tu corazón, no habra amor que puedas reflejar para tu pareja, así es que debes rogar por tener el amor de Dios; el amor de Dios te va a llevar a comprender a tu esposa y a ti esposa a tu esposo, deja a un lado la lucha de poder, la lucha de los sexos, Dios nos creo para soportarnos el uno al otro, nos hizo hizo dueños al uno del otro, por eso dice la palabra que ya no nos pertenecemos a nosotros mismos, que ahora el esposo es dueño del cuerpo de la esposa y viceversa. ¿Porque no darle la oportunidad a Dios de que enriquezca nuestro matrimonio al principio? Los conflictos en el matrimonio son un buen ingrediente, ya que por medio de esos conflictos nos vamos conociendo el uno al otro
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