Hasta la fecha la familia ha sido la base ineludible de la sociedad; la familia ha perdido la visión
para la que fue formada y nos hemos visto orllados a seguir los dictados del humanismo, un humanismo muy relativo a lo que el mismo ser humano cree, si para un hombre lo malo no es malo, no es malo, o si algo es bueno, para él es bueno, echando a la basura los principios éticos y morales que por mucho tiempo normaron la conducta del ser humano, no estoy hablando de una normatividad bíblica, sino de una normatividad moral social, todo esto fue hecho a un lado para dar paso a ese humanismo que en nombre de la libertad, ha orillado a esta joven sociedad a atentar contra si misma, con la homosexualidad, el adulterio, la fornicación, la idolatría, el ocultismo y tantas otras lacras que ha cubierto la conciencia humana.
Pero para aquellos que vivimos bajo la normatividad de Dios, ese Dios santo que dice que seamos santos como El es santo, aquí quiero hacer una aclaración acerca de la santidad, la santidad no se mide como lo han querido hacer algunos cristianos que gustan de criticar y marcar a las personas por su creencia de lo que es la santidad. santo, es simplemente apartado, esto es que Dios nos ha escogido para apartarnos de todo pecado, es por eso que Jesús en su oración le rogaba al Padre: Padre te pido que los gurades del mundo, porque estan en el mundo; pero, no son del mundo. Esto es que los que hemos aceptado a Jesús como nuestro Salvador, hemos sido apartados (santificados), para cosas mas grandes y excelentes. Así es que cuando Dios nos permitió llegar al altar con nuestro conyuge, al momento que el pastor puso sus manos sobre las nuestras juntas y declaro: los declaro marido y mujer en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, nuestro matrimonio fue santificado, porque tomamos esa declaración como verdadera para nuestro matrimonio, es entonces que tenemos el deber de enseñar a nuestros hijos el amor de Dios, los principios y valores cristianos, para su futuro vivir, esos hijos observan nuestro actuar como matrimonio, persiben nuestra manera de vivir, así es que los hijos son nuestros mas cercanos críticos. (La proxima seguiré hablando del asunto) Dios te bendiga